Los legisladores de todo el mundo están acercándose a la idea de la legalización de la marihuana, pero no todo el mundo está muy entusiasmado con la creciente tolerancia del cannabis.
“Me gustaría que los estadounidenses se detuviesen con esta legalización”, cultivador de marihuana mexicana Rodrigo Silla le dice The Washington Post.
El comercio de marihuana EE.UU. siempre ha sido proporcionado por los cárteles al sur de la frontera, particularmente en el estado de Sinaloa de México, conocido como el “Triángulo de Oro”. Pero a pesar del repunte en la demanda, la relajación de las leyes sobre la marihuana ha hecho que los precios al por mayor del cannabis bajen de $ 100 a menos de 25 dólares por kilogramo en los últimos cinco años.
“No vale la pena más”, dice Silla, que tiene 50 años y ha cultivado ilegalmente toda su vida. Este año será la primera que el agricultor se resiente con la marihuana como una fuente de ingresos.
En Canadá, Columbia Británica el abogado John Conroy se hace eco de este sentimiento. En el país se ha visto tanta marihuana de cultivadores con licencias emitidas por el gobierno que los distribuidores del mercado negro han estado luchando por mantenerse a flote.
“El mercado se ha derrumbado. Hay un exceso de oferta, como consecuencia de que el cannabis crezca legal … todo tipo de personas están fuera del negocio. El precio ha bajado y ya no se puede vender “, explica.
“¿Por qué el crimen organizado no puede vender su propio producto? La amenaza a la seguridad pública está disminuyendo rápidamente. Así que usted dice, bien, esta [especie de mercado libre] ha sido más eficaz que lo que ha hecho la policía en los últimos 100 años “.
La policía parece coincidir en que la prohibición es lo que hace del comercio de la marihuana que sea tan lucrativo y atractivo.
“No hay absolutamente ninguna forma de hacer frente a nuestros problemas de drogas con nuestras políticas actuales, simplemente porque hay demasiado dinero por la venta de drogas ilícitas en este mundo”, dice Const. Kash Heed, un jefe de policía en el oeste de Vancouver, BC, una de las ciudades más prósperas de Canadá.
“La prohibición de las drogas, al igual que la prohibición del alcohol, es lo que proporciona los enormes beneficios a las organizaciones criminales que proporcionan las drogas en nuestras calles”,agrega Major Neill Franklin, un veterano de la policía del estado de Maryland y el Departamento de Policía de Baltimore durante 34 años .
Curiosamente, el Partido Liberal de Canadá está creando una plataforma para las elecciones federales del próximo año que incluye, en parte, una promesa para legalizar la marihuana.
El primero de sus cinco argumentos a favor de la legalización de marihuana es que a gran escala es necesaria para combatir el crimen organizado.
En un documento de 2013 titulado La legalización de la marihuana: Responder a preguntas y elaborar un marco , el partido afirma que “la despenalización de pequeñas cantidades de cannabis daría lugar a un sistema en el que es legal poseer, pero no ofertar.”
“Sin la legalización de la producción, venta y consumo en conjunto, el crimen organizado continuará satisfaciendo la demanda del mercado y la aplicación de la ley las agencias y profesionales de la salud seguirán en el limbo”, concluye el documento.
Fuente sacada: Leaf Sciencie
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